
Los deportes de élite actuales están inspirados a imagen y semejanza de las peleas y batallas anteriores, pero poniendo punto y final a la sangre, pero no del todo a la violencia, sobre todo en los númerosos deportes de contacto que existen como el boxeo, por ejemplo.
A la gente le da morbo la confrontación, la rivalidad y solo hay que comprobar los númerosos torneso ilegales de apuestas entre batallas de gallos, perros o lo que sea con tal de montar el número.
Los políticos lo saben, y lo aprovechan para captar la atención mediática y de paso montar su propio espectáculo. En el mundo del corazón también lo saben aprovehcar y cada dos por tres crean sus luchas fictiacias entre sus personajes para atraer la atención. Un buen ejemplo de estos es nuestro amigo Coto Matamoros, showman experto en soltar en los morros de su rival sus mejores armas intimidatorias y palabreria castiza. Él es todo un ejemplo de como sacar provecho mediático de la confrontación e incluso hacerlo su medio de vida.
Los periodicos deportivos venden más cuando existen piques o los periodicos convencionales cuando el clima político está excitado o enrarecido, y programas varios ponen mesas de debates para crear conflictos dialecticos de primer nivel en pro de sus audiencias...
Así que ya sabeis, si os insultan en público y hay cámaras, pedid el 50%, que no os timen
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