Ayer en Nürburgring se volvió a ver una auténtica exhibición de espectáculo. Una gran carrera donde la lluvia puso ese ingrediente extra que muchas veces le falta a la Fórmula 1. Espectáculo en estado puro, donde pudimos ver una multitud de adelantamientos y una sucesión de maniobras arriesgadas. Alonso demostró que es el mejor piloto del mundial y que va a por sus tercer campeonato.
La duda salta cuando pienso, ¿Por qué hay otros grandes premios tan aburridos y donde ver un adelantamientos es casi un milagro?¿Fue el factor lluvia la clave del espectáculo?
Si la respuesta es afirmativa, deberían incluir aspersores con riego automático en las calzadas y que aleatoriamente se activasen cuando la cursa se volviese aburrida como pasa en otras tantas ocasiones...
La duda salta cuando pienso, ¿Por qué hay otros grandes premios tan aburridos y donde ver un adelantamientos es casi un milagro?¿Fue el factor lluvia la clave del espectáculo?
Si la respuesta es afirmativa, deberían incluir aspersores con riego automático en las calzadas y que aleatoriamente se activasen cuando la cursa se volviese aburrida como pasa en otras tantas ocasiones...
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