lunes, diciembre 18, 2006

No espero que mi hijo sea listo, sólo que tenga suerte


El factor impredecible domina el mundo muy a nuestro pesar, pero es la cruda realidad. Ni George W. Bush ni la ONU, ni ningún magnate tipo Bill Gates pueden controlarlo, el mundo es caotico e impredicible. No importa lo listo que seas, lo hábil que puedas desenvolverte en un entorno, el caos te puede hacer fracasar o incluso matar sin casi enterarte. Esta idea es realmente dura, fuerte y para mi casi imposible de soportar, pero la realidad nos supera. La humanidad desde que dispone de conciencia y puede reconocerse a sí misma ha intentado dar sentido a lo que no puede controlar para aliviar su miedo a lo caotico. Palabras como destino no son más que palabras vanas o eufemismos para evitar decir que realmente no puedes controlar, y por lo tanto, acabas diciendo "es que era su destino", "era su hora", "si te tiene que pasar te pasa","estaba escrito"y la clásica "ha tenido mala suerte". De esta forma das una explicación y quitas miedo a tu mente, para evitar el efecto "a mi también me puede pasar". Amuletos vanos, rituales místicos para conseguir la tan ansiada suerte y controlar el caos, a veces con más o menos éxito.

Este tema es el leit motiv de una gran película, se trata de Match point, de Woody Allen. Como ejemplo de esto pondre una traducción de un dialogo del protagonista:

"El hombre que dijo "Prefiero ser afortunado que bueno" acerto en la vida. Las personas tienen miedo para enfrentarse al hecho de que gran una parte de la vida es dependiente de la suerte. Hay momentos en que la pelota golpea la cima de la red, y por una fracción de segundo, puede avanzar o caer atrás. Con un poco de suerte, avanza, y ganas. O quizá no, y pierdes. "

No quiero desvelar la trama de la magnífica película donde Scarlett Johansson se ganó el caché de gran actriz, pero es de esos guiones redondos que de tanto en cuanto podemos disfrutar.
Otra gran película donde podemos ver este tema es Jurassic Park. Aquí esta representado en el libre albedrío de los animales(aunque sean fósiles resucitados gracias a la genética) que no pueden controlar, ni a sus empleados(Dennis Nedry), ni tampoco el clima(que llueva ayuda al caos de la isla y también a la muerte de Nedry) como bien apunta el personaje del Dr Ian Malcom en el film.

Ante semejante panorama de poder sobre nuestas vidas ajeno a nosotros mismos, no nos queda más que vivir y dejar vivir, cantar con Brian McFerry "Don't worry be happy" o silvar como Brian en el magnífico final de La vida de Brian y siempre mirar el lado más brillante de la vida. Quizás ese lado brillante se consiga al lado de mujeres como Scarllet....

Suerte para todos!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Jejejejej, pos espero que tengas suerte con este blog.

Anónimo dijo...

Pon mas fotos de la Scarlet k sta k sta para hacer infusion con su tampax